El problema de la soltería

Lo miré sentado, estaba solo, así que decidí acercarme, después de todo habiamos quedado ese día al final de clase en ir a ver la posada... pero por cosas de la vida no pude esperar mucho tiempo.

-"Hola... ¿Qué haces aquí tan solo?"- murmuré mientras tomaba asiento y le sonreía se sorprendió al verme, definitivamente no esperaba verme -"lamento ese día no haberme quedado para esperarte... tuve que hacer otras cosas de urgencia"- cerré mis ojos, esperaba que no estuviera molesto o algo así -"de todos modos gracias por la intención... fue mi culpa no poder llegar ahí para el final de clases"-

Lo miré a los ojos y suspire mientras movía la ropa en mi bolsa, si necesitaba lavarla no tenía muchos cambios al final y tenía que retirar... ciertas manchas.

Me senté, con cuidado mientras acomodaba mi falda, especialmente porque era alta. Lo miré unos minutos para después contestar.

-"Si, me dieron una dirección... me quedaré unos días"- cerré mis ojos recordando el evento sucedido en la posada -"al menos por un tiempo, hasta que pueda encontrar a mi tía"- y sinceramente estaba pensando que debía encontrar una casa y una tía para vivir. ¿Pero quién podría ser?.

-"Dime... ¿estas lavando tu ropa?"- sonreí, era obvio estabamos en una lavanderia -"si.. perdón, creo que anda un poco confundida"- sonreí tímidamente mientras me acomoda en el asiento, pronto una señora se levanto y dejo el asiento a mi lado libre -"¿Porque mejor no te sientas?"- le indique el asiento a mi lado -"no creo que sea muy cómodo estar parado, especialmente si tenemos que esperar nuestros turnos"- sonreí.

¿Planes para más tarde?. Definitivamente no... además tenía que ir a trabajar en la librería a partir del lunes, había conseguido trabajo. Aunque me dijeron que tenía un compañero... bueno al momento era todo lo que sabía. En fin. Pero fuera de eso, este fin de semana me encontraba libre, ya no diría lo mismo la próxima, no había muchas cosas que hiciera... así que mire al chico y le sonreía.

Chris era de las pocas personas en las cuales puedes confiar plenamente la primera vez que las conoces, además era agradable y me gusta... era tierno.

-"No... no tengo mucho que hacer... mejor dicho nada que hacer"- le sonreí con cariño -"No no tengo planes para la tarde..."- miré la expresión de su rostro -"¿Por qué?"- estaba feliz.

Le sonreí.

Sonreí, mientras sin darme cuenta acercaba mi rostro hacia él, mis ojos... ah esperaba que no se estuvieran un poco rojos, solo sonreí cuando estaba centímetros de su rostro. Podía sentir su corazón acelerarse por mi presencia y sus mejillas tomar un delicado tono rojizo.

Solo sonreí. -"Claro estaría bien, digo ir a pasear... "- estaría bien, después de todo, él era amable y educado. -"Ir a algun lugar.... mhm.. realmente aun no estoy familiarizada con el lugar, pero..."- tenía ganas de -"vamos al cine..."- me quede pensativa unos minutos.

Bueno.. ¿a que hora podría pasar por mi?, no estaba muy segura...

-"No lo sé pero creo que a las siete estáría bien... me estoy quedando en la Posada Inn del pueblo por unos días más"- sonreí -"puedes pasar por mi a las siete, estaré lista"- le sonreí. La verdad me estaba haciendo cada momento una amiga del chico y eso me gustaba.

En New York, no había tenido muchos amigos... la mayor parte del tiempo me sentía sola, en aquella casa o en aquel colegio.. nocturno... era mejor de esta forma. Entablar amistades...

Me acerque delicadamente a el, un mecho dorado de su cabello estaba revuelto, así que lo acomode, fue entonces que pude sentir el color y la sangre bombear hacia su rostro. Definitivamente tenía un efecto sobre él... pero...

Bueno... el tiempo diría todo....

-"Lo siento si te incomodé, pero tenías un cabello sobre tu rostro"- sonreí timidamente -"Entonces... ¿Qué película podremos ver....?"- la verdad ya había ido al cine esa semana.. pero siempre hay más opciones que ver.

Me ayudó con mi canasta. Me sentí complacida, era un muchacho bastante amable y educado. Nos acercamos a la lavadora. Fue entonces que comencé a colocar en la misma mi ropa.

-"¡Claro!, si hay tiempo podemos ver otros lugares"- le sonreí, estaba tan entretenida con el chico que no me di cuenta de que una mis blusas. Aquella con la pequeña manchita de sangre cayó al piso (era mi culpa estaba bebiendo sangre de un vaso y se me derramo un poco en la manga). Chris se quedo espantado. Tomé la blusa rapidamente y lo miré avergonzada.

-"No te preocupes... no es nada, me corte el dedo el otro día y las manchas cayeron en la blusa y como ves es de color blanco"- se mantuvo en silencio mientras terminaba de colocar la ropa y encedía la lavadora.

Intente sonreir -"lo de la mancha.. a veces soy muy descuidada y me corte con las hojas de uno de mis cuadernos, y mientras intentaba encontrar con que curar la herida manche mi blusa... suele pasar, soy a veces algo despistada"- lo miré a los ojos -"no te preocupes... y bueno ¿sabes de alguna película buena que este dando?"- trate de cambiar el tema inmediatamente.

Le sonreí. Era notablemente encantador. Pero era cierto... a veces podía ser algo despistada, no se si era el hecho de mi cuerpo permaneció en el de una niña de 15 años o era parte de mi personalidad.

Suspiré. Mientras le ayudaba a colocar su ropa en la lavandería. Se sonrojo un poco cuando sin darme cuenta tome sus boxers, miré en otra dirección avergonzada. -"Lo siento..."- si fuera una persona humana, debería estar roja de la verguenza.

Después recorde qu me había dicho sobre cuales eran mis hobbies ¿Además de ser un vampiro y beber sangre humana, claro no necesariamente matar a un humano...? pensé para mi misma y solte una risilla, la verdad eso no era un hobbie, eso era una condición que ahora llevaba...

- "Me gusta cantar..."- le murmuré mientras veía en otra dirección algo tímida -"también dibujar y escribir... pero creo que más cantar"- suspiré -"en New York me gustaba cantar en las calles, por el mero placer de hacerlo... era divertido, además me daban una que otra moneda..."- me miró asustado -"¡no te preocupes, no era que no tuviera dinero!"- porque tenía bastante... en mi vieja casa - "pero lo hacía porque era entretenido..."- sonreí abiertamente - "aunque no estoy muy segura si soy buena..."- solte una risa tímida, el ciclo de lavado en mi ropa cambio al segundo paso.

Le sonreí mientras bajaba la cabeza pensativa, la verdad fuera de ser una clase de Hobby jamás había cantado delante de otros antes, cerré mis ojos mientras con Chris nos sentabamos a esperar que las prendas de ropa de cada uno estuvieran lista.

-"Suena interesante"- le sonreí -"lo de cantar juntos... bueno si quieres, es más un hobby que hacía en casa"- donde quiera que hubiera sido mi casa -"mis dibujos..."-serían confusos de entenderlos- no estaría mal que pudieras verlos...- le sonreí - "¿así que tus padres cantan música Country?"- me quede pensando -"suena muy interesante... ¿cuáles son tus nombres?"- tenía curiosidad por saber los nombres de los padres del chico...

Note el timbre de tristeza en su voz, así que preferí no seguir hablando del tema, después sin que me lo esperara, me pregunto sobre New York. Estreche mis ojos.

- "Es..." - el silencio me inundó - "es una ciudad bastante concurrida" - miré la expresión de su rostro, entonces mire a la nada, la verdad que salir de New York habia sido una decisión personal, ante los sucesos... pero era lo único que podía hacer.

Escapar...

Cerré mis ojos -"es un lugar frío la mayor parte del tiempo" - apreté mi mano en un puño -"no me refiero al clima, la ciudad es grande llena de lugares en donde puedes visitar y pasear, pero es muchas veces fría y distante... las personas" - vampiros - "se distancian unos de otros y a veces puede ser peligroso si no conoces ciertas zonas de la ciudad" -porque podrías convertirte en el alimento de un grupo de vampiros o ser asesinado por pandilleros - "hasta el momento me siento... comoda aquí, es tranquilo... aunque sea pequeño, es diferente"- definitivamente pacífico le dedique una sonrisa - "aunque extraño ciertas cosas de vivir allá"- cerré mis ojos.

Era todo lo que podía decirle. El silencio nos inundo.

Al parecer, ambos habíamos tocado fibras sensibles sin proponérnoslo. El silencio se hizo incómodo hasta que la "musica" de la lavadora de Amanda indicó que el ciclo había terminado. Ella se levantó, sacó su ropa y la acomodó en la secadora de gas.

No se porqué me sentia - de repente - culpable. Sacudí mi cabeza, eso no era cierto. ¿Porqué lo sentía de esa manera tan clara?

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Me levanté de la silla y me acerqué para ayudarle.

-Si trabajamos los dos, terminaremos más rápido.

Le sonreí cuando se ofreció ayudarme. Solo le sonreí mientras terminabamos de colocar toda mi ropa en la secadora. Acción seguida la puse a trabajar. Entonces miré a Chris y le sonreí.

-"No te sientas mal... ¿si?"- lo miré a los ojos mientras acercaba mi mano contra su mejilla, el se movió un poco, mi mano era demasiado helada -"creo que nuestras vidas, son lo que son... no importa si son dolorosas, son nuestras vidas, sin ellas talvez... hoy no seríamos nosotros"- me quede en silencio. Después me aleje de él para volver a sentarme en el lugar donde habíamos estado. Entonces él hizo lo mismo y ambos continuamos mirando el movimiento de la lavadora.

-"¿No te parece interesante?"- susurré, él me miró confundido -"el constante vaiven de lá máquina..."- me reí de mi misma -"lo siento tiendo a mirar cosas sin sentido"- coloqué mi mano detrás de mi cabeza -"son cosas que a veces hago... bueno en fin... veamos"- me quede pensativa -"ya que vamos al cine ¿qué tipo de péliculas te gustan?"- esperé atenta su respuesta.

Me quede en silencio ante la extraña historia de Chris... entreche el cejo. Podía ser posible que su hermano fuera... raptado por uno de los nuestros. Pero me intrigaba bastante la idea de que el "mounstro" hubiera vivido en la lavadora. ¿Qué tal si era la imaginación del niño lo que hacía de la lavadora el mounstro mientras el mounstro verdadero lo seguía...?. Podría ser uno de los nuestros, pero jamás había escuchado de una personalidad tan distorsionada entre los vampiros...

Bueno... en realidad había muchos, pero.. perseguir y atormentar a un ¿niño?, durante años. Sentí algo extraño en mi interior, por lo que cruce mis brazos. Yo también tenía un lado oscuro dentro de mi propia especie.

Miré a Chris - "No creo que sea demasiado tétrica..."- tengo mis propias pesadillas vivientes en mi pasado -"solo algo extraña..."- lo encaré -"usualmente los niños pueden ver cosas... y tratar de asimilar lo que vieron con algo familiar... no lo sé"- es díficil... comprender lo que un niño ve en su imaginación, me sucedió... cuando comencé a ver el futuro a los cinco años - "¿Nunca te dijo algo... más concreto cuando creció?"- me quede en silencio -"¿Qué edad tenía cuando desaparecio?"- y de repente estabamos hablando de algo inquietante en la vida de este chico. Su hermano desaparecido.

Porque mi mundo es más oscuro de lo que parece y puedo conocer las sombras que lo acechan....

Pero... está era muy... extraña...

-Dejé de verlo a los diecisiete, justo en nuestra fiesta de cumpleaños. Creo que después de todo, quería vivir su propia vida, estaba harto de que siempre lo riñeran por cualquier cosa... Imagino que el deseo de aventura lo alejó de nosotros... De mí, más que nada, porque soy yo el que más lo extraña, ojalá algún día tuviera la oportunidad de volverlo a ver.

Recordar esa nefasta fiesta frustrada me hizo sentir miserable.

-Bueno, creo que tu ropa está lista.

Me quede en silencio. Sin darnos cuenta empezamos a colocar nuestro humor en un punto bastante delicado. El pasado es díficil... no es algo que olvidas, no es algo que quieres recordar... solo permanece. Con cuidado me acerqué y tome la ropa del cesto.

-"Lo lamento... de pronto... la situación se puso bastante negra"- lo miré a los ojos y acaricie su rostro -"no deseaba esto... disculpame"- le sonreí con tímidez -"creo que tu ropa tu ropa también esta lista"- le señale la máquina que tenía una señora esperando por que la ropa fuera retirada, con una sonrisa lo ayude a sacar la ropa para después entre ambos llevarlas a las secadoras.

-"Yo...mhm..."- me quede en silencio -"no me gusta ver triste a nadie... lamento que haya comenzado preguntas incomodas"- suspiré, mientras mi mente trataba de cambiar el tema -"... mhm.. ¿que te gustaría ver en el cine?"- le sonreí -"en todo caso para disculparme, yo pagaré las entradas... realmente no me gusta ver tristes a mis amigos"- baje la cabeza apenada -"claro... si no te molesta ser mi amigo"- nos miramos a los ojos.

-No te preocupes y... En realidad no estoy triste sólo nostálgico. Mi hermano era todo para mí y el no tenerlo a mi lado es difícil. Ya sabes lo que dicen, que entre gemelos hay un lazo aún más estrecho. El era algo asi como mi ídolo - aparte de ser mi hermano mayor por cinco minutos -sonreí- A veces, cuando las cosas marchaban bien entre los dos y no peléabamos, nos la pasábamos genial. En fin, ya no hay que hablar más de situaciones incómodas... Mejor hablemos de nuestra ida al cine.

Me acerquá a ella, a su rostro para mirarla mejor.

-Y seré yo quien lleve los gastos, ¿entendió señorita?