Con mucha Hambre

Pude ver como la jovencita era conducida hacia su asiento, mantuve mis vista sin distraente en el libro entre mis manos mientras fumaba un cigarillo, fue en un momento que mientras mantenía mis ojos cerrados un mesero me pidio la orden y que apagará el cigarillo.

Sin mirarlo deposite el cigarrillo contra el metal dorado de mi encendedor.

La chica frente a mi era bastante dulce, el color de su cabello y mejillas, especialmente... había algo notable en ella, era como nosotros pero a la vez no lo era, con cierta educación mientras le dije al mesero que solo trajera un vaso de vino (a lo cual me miro bastante desconcertado). Le sonreí amablemente a la muchacha de la mesa lejana a la mía.

- ¿puedo sentarme? - pregunté estaba siendo demasiado atrevido con la niña, pero podía olor su aroma, era totalmente diferente a los aromas de vampiros... había algo en ella que me intrigaba, era algo diferente... algo que estaba vivo.

Vi como se incomodaba un poco - mis disculpas por ser tan atrevido... no fue mi intención pero - la miré seriamente - desde el momento que llegó aquí, pude sentir algo diferente... algo que no había notado jámas en un uno de nosotros - Lo último lo dije en un susurró, no quería atraer los oidos curiosos.

- mi nombre es ethan willmore, soy nuevo... en el pueblo y en la secundaria Forks - le sonreí - un gusto pequeña dama -

Me sonrió cuando me hablo con cortesí para tomar el asiento. Note que sus mejillas se sonrojaban y de alguna forma su cuerpo irradiaba, demasiado diferente a lo que estaba acostumbrado.

No solo es su olor... es toda su presencia....

Me quede pensativo mientras enfocaba mi mirada en ella, era bastante risueña, alegre y simpática. Le sonreí de vuelta cuando ella me dedicó una sonrisa. Fue entonces que necesite hacerle aquella pregunta. Era algo nuevo para mí.

- disculpame si soy asi de atrevido... pero noto algo diferente en ti, no se lo que és, nunca antes había visto o sentido la presencia de algo similar... ¿por qué eres tan diferente?- entrecerré mis ojos. El silencio nos invadió.

Había esperado toda clase de respuestas ante mi curiosidad pero jámas hubiera imaginado la que la chica me respondió. ¿Mitad humana, mitad vampiro?.

- ¿es eso posible...?- susurré impresionado mientras miraba a la muchacha - jamás había encontrado una persona como tí... es...- el silencio me inundo - fascinante - le sonreí abiertamente - cuentame de tí... ¿cómo es posible.. genéticamente? - me quede en silencio - ¿como fue tu desarrollo...?- estaba tan extasiado, era lo más fascinante que había encontrado. Una criatura que mezclaba ambas razas, la vida.. y la muerte.

Le di mi mano amablemente y ude sentir su apreton, trataba de conocerme mejor... así que por protección, bloquee algunos de mis recuerdos más profundos, dejando solo aquellos que me mostraban como cantante y escritor. Le sonreí.

- mucho gusto Renesmee, el placer es todo mío - me quede en silencio - mi nombre es Ethan Evan Willmore, soy el nuevo profesor de lenguaje y comunicación en la escuela de Forks - le sonreí - lamento mucho ser tan... inoportuno y entrometivo, mi querida niña, pero tu naturaleza es una curiosidad que jamás había visto antes, no podría más que decir que eres... una criatura hermosa, porque tienes la vida en tus vida, lo que me parece algo maravilloso - le sonreí.

Le sonreí. Me casusa cierta gracia la velocidad con la que hablaba, pero al parecer si.. me confirmó que su padre era un vampiro y su madre una humana. Me quede pensativo unos instantes... entonces era posible para nosotros... el silencio se hizo presente en mis pensamientos. Miré a la chica ahora era su turno de preguntarme.

- si pequeña, seré tu profesor - la miré a los ojos - estaría encantado de tener a tan linda señorita en mi clase - nos quedamos en silencio - espero que puedas asistir a una, trataré de hacerlas lo más interesante posibles -

Me sentía cómodo con la libertad que la muchacha me brindaba, le sonreí abiertamente. Primero le tenía que contar algunas cosas de mí. Me quede en silencio y después hablé con ella.

- bueno... espero verte alguna de mi clases, estoy tratando de que sean lo más entrenidas posibles - mi mente viajo a mis estudiantes, todos parecían disfrutarlo, menos uno en particular... moví mi cabeza en desaprobación. Supongo que algun día el chico maduraría. Miré a la señorita frente a mi una vez más, parecía estar muy atenta - vengo desde francia hace poco... unos meses, me gusto mucho Forks porque parece un pueblo pacífico y agradable, lo que quiero es vivir con tranquilidad como un simple maestro - le sonreí - ahora.. si no te molesta podría preguntar... ¿que edad tienes?- tenía nuevamente aquella curiosidad, sus ojos eran inocentes, físicamente ella luciría de unos 15 años... pero ¿cuál era su edad real?.

Me sonreí un poco de su forma de actuar. - seré sincero... he viajado por el mundo y muchos lugares, pero nunca había encontrado una criatura como tu..- me quede en silencio - pude notar desde el inicio que eras un ser diferente... pero me parece intrigante y fascinante poder ver un ser como tu...- sonreí - aunque suene bastante extraño de mi parte decirlo... pero tienes como dije antes dos características importantes - la miré a los ojos - formas parte de nuestro mundo... y el mundo de los humanos - suspiré - lo que me parece bastante interesante... y mágico, si puedes así decirlo - el silencio me embargo - es... extraño tu metabolismo, creces mucho más rápido que cualquier ser humano, pero tu tiempo es más veloz que el de un vampiro.... en cierta forma creo que eres una paradoja - me miro asustada - lo que quiere decir... que eres muy especial... y me alegro por ello - nos quedamos en silencio.

Me reí un poco cuando la muchacha hablo de la concepción por accidente... me recordaba lo que usualmente escuchaba de los muchachos en alguno lugares o las chicas... a una edad que los humanos no consideraban la adecuada, la miré a los ojos - no creo que seas un accidente... no fue algo planificado o posible dado el caso de que nosotros no podemos... tener hijos, pero creo que es interesante como las cosas suceden... todo tiene un motivo, muchacha... y creo que tu sabes quién eres...- sonreí - no... tengo los años que tengo pero... nunca había visto un ser como tu, es díficil.. pero eso es el misterio de nuestro mundo - me quede en silencio.

La miré con mucha atención antes de continuar con mis palabras - bueno... me alegra mucho haber vivido lo suficiente para conocer un ser como tu... se que puede sonar bastante extraño, pero me siento muy emocionado... es complicado comprenderlo, algunos vampiros deben sorprenderse... pero en mi caso me siento de alguna forma agradecido - le dediqué una sonrisa - sobre mi... bueno tengo bastantes siglos de edad.... he vivido mucho...- suspiré - pero esta bien... durante años conocí una infinidad de personajes... y tengo muchos buenos recuerdos de ello - me quede en silencio - trabajo al momento como profesor en la escuela de Forks -